"Con un Pronunciamiento oficial de las Mujeres visibilizaron su pedido a los integrantes de la Asamblea Constituyente, cuya propuesta fue entregada para que sea incluida en las reformas de la nueva Carta Magna del Ecuador.

La propuesta fue presentado el 28 de noviembre de 2007, en un especial acto de mucha significación para las mujeres del Ecuador, en la ciudad de Montecristi.

Resumen Ejecutivo _{(transcripción textual)}

Buenos días, señoras y señores Asambleístas de las diferentes provincias del Ecuador, distinguidas autoridades de Montecristi y la provincia de Manabí, compañeras de las diferentes organizaciones y movimientos de mujeres de esta provincia y del país, señoras y señores presentes:

TRAIGO LA VOZ DE LAS MUJERES QUE VIVEN CON EL VIH-SIDA, a lo largo y ancho del país, para decirles que vivir con el virus del VIH es muy difícil, pero más difícil es vivir con el desamor, el rechazo, la negación al trabajo, al amor y a una vida digna.

La epidemia del VIH-SIDA en el mundo y en nuestro país, está afectando a más mujeres y su principal fuente de infección son las relaciones sexuales con sus parejas permamentes.

Según los últimos datos del Ministerio de Salud Pública del Ecuador, de cada 100 mujeres que han sido diagnosticadas por VIH, 76 son amas de casa, eso significa que el VIH lo trajeron los maridos.

Cuando se conocieron los primeros casos de VIH-SIDA en la década de los 80, había 20 hombres infectados por cada mujer infectada. En la actualidad esta tendencia está disminuyendo cada vez más, ahora existen 2.7 hombres por cada 2.3 mujeres. Esto hace ver que en los últimos 20 años, la velocidad de crecimiento de la epidemia está siendo mayor en las mujeres que en los hombres.

El impacto en las mujeres, tanto jóvenes como adultas, al conocer su diagnóstico VIH positivo, es muy fuerte; sin embargo, en la mayoría de ellas su calidad de madres les permite superar esta situación, pues sus hijos se convierten en su norte y en su razón de vivir.

Esta realidad se hace mucho más difícil de afrontar cuando la violencia entra a nuestras vidas en forma de silencio de nuestros maridos, al callar que han sido diagnosticados VIH positivos, pese a saber que vamos a tener un hijo. En forma de negación, cuando no quieren utilizar el preservativo "porque no se siente igual", aunque sabe que nos podemos reinfectar. Aumenta cuando nos dejan solas a cargo del VIH y de nuestros hijos/as y hasta del propio cuidado de la salud y la vida de ellos mismos. Se hace más visible cuando ellos nos niegan el derecho a participar en grupos de ayuda mutua para fortalecer nuestra autoestima, conocer a otras mujeres y salir adelante juntas.

La violencia también se hace sentir cuando golpeamos las puertas de los hospitales y no nos atienden o nos dejan al último de todos los pacientes por "tener SIDA"; cuando nos niegan el derecho a decidir si queremos ser madres o no, también por "tener SIDA".

Acaso no es violencia el ser despedidas del trabajo o no conseguir trabajo por vivir con el virus?, esto hace doble y triplemente pesada la carga de vivir con el virus y afrontar el presente y el futuro de nuestros hijos.

"Dígame, por favor, por qué a mí, por qué tuvo que pasarme a mí"

Esta es la primera idea que viene a nuestras mentes, oculta tras de sí el engaño, la mentira, el irrespeto a nuestros derechos más elementales.

Por eso, queremos pedirles a ustedes, señoras y señores Asambleístas, que han sido elegidos por nosotras también, por las miles de mujeres que viven con VIH-SIDA, no nos den la espalda, apóyenos, vigilen y aseguren que se cumplan nuestros derechos en cada rincón del país, por todos/as los funcionarios/as de todas las instancias del Estado, tanto a nivel nacional como local.

1. Aseguren en el presupuesto del Estado la adquisición permanente de los medicamento antirretrovirales (ARV) y la provisión y entrega oportuna y consistente en los hospitales de todo el país, incluyendo el Hospital del Seguro Social.
2. Promuevan y viabilicen la educación de la sexualidad plena y con responsabilidad desde las escuelas hasta las universidades y en todas partes del país para que disminuya cada vez el número de personas que son diagnosticadas con el VIH.
3. Prioricen la inversión en la educación antes de que la epidemia se extienda tanto que la atención, el cuidado y el tratamiento pueda verse afectado al no poder abastecer al gran número de personas que van sumándose al ejército de personas que vivimos con VIH y SIDA.
4. Garanticen el derecho a la educación nuestra y de nuestros hijos/as, no queremos que la discriminación sea extendida también a ellos/as.
5. No queremos que la prueba de VIH siga siendo un requisito para estudiar, trabajar o ponerse un negocio propio, esto profundiza la discriminación y la exclusión.
6. Queremos que se sancionen a los/as funcionarios/as públicos que faltan a la confidencialidad sobre nuestro diagnóstico.
7. No queremos medios de comunicación que sigan difundiendo mensajes negativos, queremos medios de comunicación que se sumen a la campaña por la educación y la prevención del VIH-SIDA.

Nosotras nos comprometemos a luchar y responsabilizarnos por nuestra vida y por la de nuestros hijos e hijas, por evitar transmitir el virus a otros, pero necesitamos su apoyo, su solidaridad y su patriotismo._MMVC

GRACIAS"

Que verdad más grande dicen nuestras amigas de Ecuador, cuan identificadas nos debemos sentir las mujeres de Arica-Parinacota y espero que también las mujeres de Chile.

Unamonos para lograr que las campañas de prevención muestren la realidad que viven las mujeres que son notificadas a diario en nuestro país, en nuestra comuna y nueva región, no podemos seguir siendo ciegos, sordos y mudos en la lucha contra la discriminación y la prevención del VIH-SIDA, somos más del 50% en Chile, también podemos hacer escuchar nuestra voz.

"La Discriminación no te protege frente al SIDA, todos y todas somos POSITIVOS".

Fuente: Corporación Kimirina