Conversamos con uno de sus líderes y protagonista del polémico video en donde es golpeado por Carabineros, cuando éstos intentaban desalojar la casa de estudios de la calle Lord Cochrane.

Alex Tapia Vásquez, estudiante de Ingeniería en Construcción en la Universidad Central y presidente del Centro de Alumnos de la misma carrera, nunca imaginó que la segunda marcha organizada por la CONFECH, el pasado jueves 12 de mayo, terminaría con él siendo grabado inconsciente cuando era atacado por Carabineros. Mucho menos imaginó que esto sería transmitido al país por el noticiario central de Canal 13.

La convocatoria a la marcha había sido temprano. Antes de las 11 de la mañana, medio centenar de estudiantes marchaban desde Plaza Italia, bajando por Mapocho, hasta la Plaza Los Héroes. Cuando la manifestación había terminado, el numeroso grupo de la Universidad Central -que por ese entonces ya comenzaban a realizar los primeros actos en rechazo a la incorporación de la inversora Norte-Sur a la casa de estudios- comenzaban el regreso, por la calle San Ignacio.

Sin embargo, a una cuadra de llegar al Parque Almagro, donde están todas las facultades con las que cuenta la Universidad Central, un grupo de Carabineros, lanza aguas mediante, comenzó a dispersar a los manifestantes que, a esa hora, ya sólo querían volver a clases.

En ese momento, otro grupo de estudiantes comenzó a tomarse la calle Lord Cochrane, provocación a la que Carabineros respondió lanzando bombas lacrimógenas e ingresando al campus Almagro Norte, donde se encuentran las facultades de Comunicaciones, Ciencias Sociales y Económicas y Enfermería. Durante todo este proceso, gran parte del alumnado que no participó en las manifestaciones se encontraba en régimen normal de clases. 

Álex, junto a un grupo de estudiantes, se encontraba por el ingreso por la calle Lord Cochrane a la Facultad de Derecho de la Universidad cuando un puñado de Carabineros, dicen, los hizo ingresar a la fuerza al recinto. “Cerré una puerta de vidrio y Carabineros trató de abrirla. Uno de ellos me tomó del brazo, tropezándome con una zancadilla, me caí y golpeé, no sé si fue contra una mampara o una puerta, porque ahí perdí el conocimiento”. Lo que Alex no recuerda y que sólo pudo confirmar con las imágenes de la cámara de vigilancia de la universidad, es que él no cayó contra una puerta, sino contra la pared de concreto del casi recién estrenado edificio de Ciencias Sociales.

En el suelo recibió golpes de puños y patadas de parte de Carabineros, los que no se percatan de que el joven estaba completamente inconsciente. Luego de reaccionar con la ayuda de otros estudiantes y de ser llevado a la segunda Comisaría de Santiago, junto a otros 10 detenidos, Álex Tapia fue puesto en libertad a las 23:00 horas de ese mismo día.

A pesar de la experiencia vivida, Álex no dejó la dirigencia del centro de alumnos y hoy es parte activa del movimiento que pretende bloquear el ingreso de la sociedad de inversiones Norte – Sur S.A a la administración de la Universidad Central, por considerar que esta haría que la institución perdiera la cualidad de ser sin fines de lucro. La discusión sobre el lucro en educación es una piedra angular del movimiento estudiantil que ya lleva un par de meses movilizándose por todo Chile.

Red Mi Voz: ¿Ustedes piensan poner alguna denuncia contra el rector o Carabineros?

Álex: Bueno, nosotros tenemos que conversarlo entre todos, pero el rector, en ese momento, fue uno de los detonantes para que pasaran estas cosas. O sea, él ordena el desalojo a un edificio que estaba en clases, por lo tanto era muy probable que carabineros sacara a los estudiantes y profesores de las salas de clases.

Red Mi Voz: ¿Han tenido reuniones con el rector?

Álex: Sí, hubo reuniones, pero en las cuales nunca se llegó a acuerdo. El rector nunca abrió el debate, todos los puntos fueron cerrados de forma inmediata. No se aceptaron las explicaciones que se daban y las tres o cuatro últimas mesas de dialogo, se han cerrado apenas se abrieron.

Red Mi Voz: ¿Hay algún avance de las demandas? ¿En qué lo notaron?

Álex: Los logros han sido más que nada políticos. Uno de los puntos puede ser la elección de nuevos asambleístas, que esperamos sean favorables a nuestra causa. 

Uno de los puntos más criticados a la administración de Ignacio Larraechea, es que los de los asuntos universitarios de los últimos meses, fueron acordados por una asamblea que contaba con la mayoría de sus miembros con periodos caducados.

Red Mi Voz: ¿Quiénes componen la asamblea?

Álex: Hubo ocho cambios, lo que nosotros más cuestionamos es que gran parte de las decisiones que se tomaron con Norte-Sur, las hicieron ocho asambleístas a los cuales ya se les había expirado el periodo, estos caducaron el año pasado y representaban a cuatro facultades: Ciencias Económicas, Educación, Arquitectura y Derecho. A pesar de eso, seguían votando en decisiones tan importantes para la universidad como es la enajenación de inmuebles.

Red Mi Voz: ¿Por qué lo seguían haciendo?

Álex: Porque entre ellos se autoprorrogaron, al estar en un periodo especial de negociaciones, el hacer elecciones iba a alagar aún más el proceso, pero si tú lo ves por el lado del estatuto, es completamente ilegal.

Red Mi Voz: ¿Cambiaría la Universidad Central si ingresa la asociación Norte -Sur?

Álex: Norte sur es un conglomerado económico, que está ligado a un partido político y  a una religión, que yo también comparto, pero no tiene nada que ver que ese grupo y religión intervenga en la creación de profesionales.

Red Mi Voz: ¿Cuanto daño le está haciendo el paro de la Central a sus alumnos?

Álex: Todo paro o toma traerá problemas para los estudiantes, pero esto se debe a la relación con el rector y a su intransigencia con las demandas. Para que continúe una mesa, tienen que haber acuerdos. Yo creo que la culpa la tienen las autoridades al no dar un pie atrás en su accionar.

Red Mi Voz: ¿Cuáles van a ser los siguientes pasos?

Álex: No sé si haya una nueva reunión con el rector ya que han habido varias y no tienen resultado, por otro lado los desalojos continuos son una respuesta negativa para no sentarse a conversar. Una toma puede bajarse negociando y no llamando a carabineros, el rector ha perdido credibilidad frente a los estudiantes, y ahora esperamos que con la nueva asamblea podamos sentarnos a conversar de manera más confiable. Ahora nosotros esperamos que ellos revisen los acuerdos y que no los vuelvan a aprobar, sentimos que hay muchos puntos que son “extraños” y que validarlos implicaría varios problemas en el futuro de la Universidad.

*Entrevista y texto por Sebastián Iturrieta