Por Cristian Pachecho de Radio U. de Chile

Ayer domingo, durante el tradicional Tedeum Evangélico, representantes de la iglesia cristiana criticaron el Acuerdo de Vida en Pareja y la discusión sobre el aborto terapéutico por considerarlas atentatorias contra la integridad de la familia.

En la ceremonia a la que asistieron el Presidente Sebastián Piñera y sus ministros, como también las autoridades legislativas y judiciales del país, el obispo evangélico Hédito Espinoza planteó que debido a la actual lucha de la minorías sexuales, “mañana tendremos que orientar al pedófilo, aquel que le gusta el incesto, mañana tendremos que orientar al que está con la zoofilia”.

Además se refirió a los homosexuales como enfermos a los cuales deben ayudar, señalando: “Se nos acusa que somos homofóbicos, no señores. Si hay alguien que tiene abiertas las puertas de nuestros templos para recibir a las personas que tienen problemas sexuales, a los gay, somos nosotros que tenemos las puertas abiertas para curar sus heridas”

Sobre el discurso del obispo Espinoza, el presidente del Senado Guido Girardi señaló que en Chile debe primar la diversidad, tanto para las iglesias y los homosexuales, como para quienes se quieren divorciar y quienes quieren postergar su paternidad a través de la píldora del día después.

Además valora la discusión sobre el aborto terapéutico, como una medida que se debe retomar luego que fuera derogada en dictadura.

“Somos el único país del mundo donde no existe este instrumento de salud y que además fue derogado por alguien que lo hizo a nombre de la vida, pero que había sido uno de los principales mancilladores de la vida, que eran el almirante Merino y Pinochet, y por lo tanto, me parece legítimo que la sociedad discuta, pero con todas las opiniones. Me parece también legítimo las posturas de todos los sectores, de todas las iglesias, pero también de toda la sociedad”, enfatizó el parlamentario.

El próximo domingo 18 de septiembre en la Catedral Metropolitana de Santiago se realizará el Tedeum Ecuménico, tradicional instancia en la que se encontrarán las distintas iglesias y las autoridades del país.