De lo propio a lo público y la verdad definitiva de Aysén

De lo propio a lo público y la verdad definitiva de Aysén

26 Febrero 2012

Que se entienda de una vez, que es necesario tomar en cuenta de una vez a las regiones y respetarlas como es debido.

Andrés Gillmore... >
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Es indudable que los acontecimientos que están sucediendo en estos momentos en Aysén, para aquellos que no viven en la región, sorprenden por su turbulencia y la fuerza y por sobre todo la unión ciudadana que se ha demostrado. Pero para los que vivimos en Aysén, esto no ha sido una sorpresa en lo absoluto. Los hechos son un fiel reflejo de lo que ha estado oculto por años en la ciudadanía aysenina, que ha salido a la luz en este fatídico febrero y eso tiene que entenderse en el resto del país: que los hechos que han sucedido en Aysén han sido por una total falta de liderazgo interno, tanto del gobierno regional, como de la propia Moneda. Que no han tenido la capacidad de entender la realidad de Aysén y de los verdaderos fundamentos de las peticiones.

Desde siempre, en Aysén los políticos han prometido planes de desarrollo, planes que al final nunca se concretan y la ciudadanía -también los más necesitados- pasan de la esperanza a la ofuscación, por sentirnos pasados a llevar y engañados. En todos los gobiernos ha sucedido lo mismo desde la misma llegada de la democracia. Llegan con promesas de mejoras sociales en campañas políticas, sacan los votos y nunca más se sabe de ellos. Hoy muchos políticos que nunca habian dicho nada, ahora se acuerdan y se suman al movimiento, solo por miedo al escarnio público y de la posibilidad de perder los votos en las futuras elecciones. Tanto es así, que en Aysén, debido a las promesas del actual presidente Sebastián Piñera, éste logro sacar el 54% de los votos, sustentado básicamente por la esperanza de que esta vez las promesas serían cumplidas y que el gobierno actual, después de veinte años de ser oposición y llenarse la boca en cómo se deberían hacer las cosas y lo mal que lo hacía la concertación, sabrían hacer los cambios necesarios y llegarían con soluciones y no con preguntas y que la regionalización por fin sería un hecho.

Las autoridades regionales  -entiéndase intendenta y seremis- han demostrado que de verdad no sirven para representar a los habitantes de Aysén. Lo demostró la llegada del Sub-secretario Ubilla hace unos días, dijo lo mismo de siempre, “vengo a escuchar” cuando todos queríamos soluciones y sabemos que ese informe es previo a su llegada y es total competencia de la intendenta, la señora Pilar Cuevas, de informar como es debido y que las autoridades lleguen desde Santiago con soluciones, lo que a esta altura es una falta de respeto enorme y solo llama a más disturbios. De este hecho solo existen dos opciones viables: o la intendenta se guarda la realidad y no informa lo que sucede con miedo a molestar a la Moneda y perder el puesto y su remuneración, sin capacidad de proyectar los sucesos futuros; o simplemente no le hacen caso en la Moneda y hacen caso omiso de sus informes y no la respetan en lo mas mínimo, que explican y fundamentan el porque del movimiento y del ambiente interno de la región y de la falta de sensibilidad y del entendimiento cabal del movimiento-AYSENINO, TU PROBLEMA ES MI PROBLEMA- y lo que representa.

Existe una versión que podría ser verdad y explicarían lo inexplicable de la situación general: se basa esta teoría de que el gobierno actual tiene enemigos internos, -la propia UDI- ya que el presidente Piñera es hoy solo un relacionador publico y de verdad los que manejan el gobierno son: Longueira, Chadwick y Mathei, todos de la UDI, que le hacen zancadillas al Presidente que es RN, usando a Aysén para destruir este partido y sacar provecho político en las elecciones municipales en unos meses más y en la presidencial en dos años. Que explicarían claramente los dichos y el actuar del Ministro Longueira. Ya que es inexplicable en un Ministro de Estado, que es ante todo un hombre inteligente, que no tenga la capacidad de ver más allá y entender la realidad de las regiones y entregar las debidas soluciones, sabiendo lo que esta sucediendo y el riesgo civil y social de un país en la que todos somos chilenos, haciendo que la división social se entorpezca más aun.

El mismo senador Horvarth de RN, ha dicho públicamente y con mucho respeto, que el tema no es político. Que le mandó un informe directo al Ministro Longueira UDI, explicándole la realidad de Aysén y de lo que se estaba gestando en la matriz social, en especial de las ciudades de Puerto Aysén y Coyhaique. En vez de atender la información del senador, el Ministro Longueira no lo tomó en cuenta y expresó muy suelto de cuerpo días después apagando el fuego con bencina, que la organización y coordinación del movimiento se hacía desde Santiago, que además era un movimiento político y no hizo nada por resolverlo. Sustentando la tesis expuesta, de que todo es parte de una maquinación de la UDI, para desestabilizar al gobierno actual y sacar provecho político. De un problema que se pudo haber remediado de ante mano y lo que también es lamentable, avalando y legitimando de como se deben resolver los problemas en el Chile de hoy, saliendo a las calles, arriesgando sus vidas y la de sus familias, por un derecho que está en la constitución y que no es posible que el gobierno actual no tenga la visión de arreglar.

Hoy Aysén es sin ninguna duda para muchos ciudadanos de todo el país, la esperanza cierta del resto de las regiones del país, que nuestra lucha sirva de ejemplo para hacer las cosas bien y rectificar el modelo de desarrollo. Que se entienda de una vez, que es necesario tomar en cuenta de una vez a las regiones y respetarlas como es debido. Con una regionalización y una descentralización adecuada, tomando en cuenta que la riqueza de Chile esta en las regiones y no en Santiago. Los ayseninos no estamos contentos con los acontecimientos que estamos viviendo, menos con los hechos violentos que han estado sucediendo. No avalamos bajo ningún prisma los hechos vandálicos y la violencia publica, tampoco el actuar represivo de carabineros, en una actitud totalmente anti chilena y en ciertos casos cobarde, fuera de todo respeto por la vida y de los derechos humanos básicos de convivencia entre chilenos. Necesitamos de verdad un nuevo fundamento en la forma de desarrollar las regiones y sobre todo de transformar la equidad social en justicia social y en eso el movimiento no claudicara ante nada.

El gobierno tiene que dar muestras de tener visión de estado y de demostrar ante los chilenos, que también son personas, que tienen sentimientos y conciencia social. Porque al fin y al cabo somos todos chilenos.

*Por Andrés Gillmore, Secretario y vocero de Corporación Costa Carrera Aysén*