Mientras el PNUD¹ presenta en su mapa electoral para Los Ríos un total de 291.076 personas en edad de votar (2017), el II ENDISC² arroja un estimado de 66.539 personas adultas en situación de discapacidad al 2015. Esto quiere decir que la región presenta un aproximado de 22,8% de votantes con algún grado de discapacidad, respecto al universo total.

Qué consideramos Participación.

La Ley 20.422 garantiza, en el papel, la participación de las personas con discapacidad en todos los ámbitos de la vida en sociedad. En ese marco, es necesario considerar “participación” al uso y disfrute de bienes de uso público, acceso a servicios, información, educación, vivienda digna y adecuada, salud, trabajo, ocio y recreación, etc. Todo junto a cuidadores/as;  también, y de forma irrenunciable, a incidir de manera libre e informada en las decisiones que afectan al territorio. En ese sentido, la ciudad y zonas rurales, todo el conjunto que habitamos, en lo humano y estructural, presenta brechas que debemos diagnosticar y subsanar.

Distribución socioeconómica y enfoque de género.

Un dato importante en cuanto a población en situación de discapacidad en Los Ríos, según el ENDISC 2015, es la distribución por quintiles: el 30,9% de las personas clasificadas entre el quintil I y II (población socioeconómicamente más vulnerable), presentan alguna discapacidad, mientras el 14,1% de las personas en los quintiles del III al V se encuentran en dicha situación. Este dato lleva a reflexionar sobre factores socioeconómicos que inciden sobre los hogares en cuyo seno se encuentra una persona con discapacidad.

También, a raíz del 30,1% de población adulta femenina que presenta alguna discapacidad en la región, versus un 17,1% en adultos masculinos, sumado a la histórica inequidad de roles hombre-mujer que ha derivado -entre otras cosas- en cuidados asumidos en más de un 90% de los casos por mujeres, se hace urgente implementar políticas públicas que además de ocuparsede la participación en su integralidad consideren enfoque de género como variable y principio rector estructural.

Democracia de la empatía.

Para lograr un aumento en la participación electoral de personas en situación de discapacidad, debemos impulsar condiciones, a nivel nacional y regional, que reconozcan y promuevan la necesidad de trabajar por una democracia de la empatía, asociando este concepto al ejercicio amplio, soberano, libre e informado de nuestro derecho a vivir en comunidad y en igualdad de oportunidades.

1. Programa Especial de la Naciones Unidas para el Desarrollo.

2. II Estudio Nacional de la Discapacidad (Senadis, 2015).

Claudio Barrientos Winter

Consejo Asesor Regional Los Ríos Ahora Nos Toca Participar

Socio ONG CEGECIS

@cbarrientoswinter | @cegecis | @ahoranostocachile

Foto: Huawei /Agencia Uno