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Los últimos y lamentables acontecimientos, y por sobre todo la bomba instalada en el metro de Santiago, no ha dejado a nadie indiferente. Es por eso, que conversamos con el secretario regional del Partido Comunista en Los Ríos, Abernego Mardones, para conocer y ahondar en su pensamiento respecto a lo ocurrido.

“Lo acontecido este 8 de septiembre en una estación del metro de Santiago no tiene ninguna relación con el 11 de septiembre. Sin embargo, condenamos categóricamente lo sucedido. Es más, hemos requerido de la autoridad de ubicar a los autores materiales, condenarlos y luego también condenar a los autores intelectuales del hecho”, asevera Mardones.

¿Cómo analiza el rol de los medios de comunicación y el provocador titular del diario La Segunda?

“Eso corresponde a mi juicio a la asimetría de la guerra. Para La Segunda, y para El Mercurio probablemente y otros medios, de lo que se trata es desestabilizar una forma de sociedad, una manera de construir sociedad. Nosotros condenamos absolutamente la guerra asimétrica, esa que construyen los medios de comunicación y los poderosos del país”

¿Piensa que con los últimos sucesos existe nuevamente una división en el país?

“No. Afortunadamente lo que ha sucedido es que el mundo político se ha cohesionado y todos han condenado de una u otra forma, con mayor o menor énfasis lo que ocurrió el 8 de septiembre. Sin embargo, creemos que lo que ocurrió el año 73 hoy día no va a volver a suceder. Por lo tanto, el llamado es a que todos construyamos una sociedad en la cual sea inclusiva y que cada uno de nosotros pueda responder por aquellas situaciones que se presentan de coyuntura como la bomba en el metro e investigar profundamente sus causas y llegar a los autores”.

Muchas personas califican el bombazo como una confabulación ¿Está de acuerdo?

“Probablemente algo de eso puede existir. Es que efectivamente los poderes fácticos están en contra de todo aquello que significa cambios, dignificar a las personas, a los seres humanos. Pero esos son un grupo muy pequeño, pero que tienen influencia y poder para producir ciertos efectos en la sociedad y que apuntan a desestabilizar los gobiernos democráticos. Si bien aquí aún no nos encontramos en un proceso de desestabilización, llama la atención que en el año 2014 se hayan producido alrededor de 27 atentados de distinta forma, con distintas intensidades, donde aparentemente se está generando un cursillo que terminó con el último lamentable bombazo”