La Comisión de Ética y Transparencia de la Cámara de Diputados, presidida por Marco Núñez, analizó hoy dos denuncias interpuestas por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) contra el parlamentario Enrique Estay luego de que éste se pronunciara contra la igualdad legal y social para la diversidad sexual “con discursos homofóbicos y denigrantes”.

Núñez y el diputado Aldo Cornejo, también parte de la Comisión, confirmaron al Movilh que se acordó por unanimidad citar a Estay para que formule sus descargos el próximo jueves y tras ello la instancia adoptará un pronunciamiento oficial sobre la denuncia. De esa manera Estay se convertirá en el primer parlamentario en la historia del país en dar explicaciones por una denuncia por homofobia.

La críticas del Movilh contra Estay tuvieron lugar luego de que el pasado 4 de junio éste sostuviera en su Facebook que algunos están “preocupados de los maricones y no del enjambre de burócratas concertas que obstruyen todo, para que los beneficios no bajen a los más pobres y clase media”.

Tras ello, y en diversos medios de comunicación, Estay validó referirse a los homosexuales no sólo como “maricones”, sino también como “sodomitas e invertidos”, dando como ejemplo que así eran denominados sus compañeros homosexuales mientras él estudiaba.

A juicio del Movilh, los dichos de Estay violentan diversos artículos del Reglamento de Ética Parlamentaria además de no estar a la altura de un cargo público y de promocionar el odio y la violencia contra la diversidad sexual, incluso en los establecimientos educacionales, lo que es un daño injustificado a jóvenes y niños que van descubriendo una identidad de género o una orientación sexual distinta a la mayoritaria, contribuyendo a que sean víctimas del bullying.

En otro ángulo, el Movilh repudió hoy las declaraciones del alcalde de Providencia, Cristián Labbé, quien ayer señaló a Radio Horizonte que la “sociedad hoy día es heterosexual (…) Hay códigos éticos: ni la mujer ni el homosexual pueden andar sueltos por ahí (…)Yo no quisiera que un nieto mío fuera adoptado por un homosexual. Quisiera que tuviera una vida normal”.

Añadió que  “no estoy por abrir mucho más que no sea el respeto, el reconocimiento, la no discriminación; pero, de ahí a cambiar las leyes naturales y empezar a generar estas ventanas irregulares en la sociedad, no las creo necesarias”.

“El señor Labbé tiene una historial de acciones y discursos homofóbicos,  transfóbicos y misóginos. Si por él fuera las minorías sexuales y las mujeres deberían estar encerradas y no salir de sus casas. Su acercamiento a nuestra realidad demuestra su intolerancia, autoritarismo y su nulo respeto por los principios de derechos humanos amparados en la Constitución. Labbé en sin duda un personaje que hace un profundo daño a la justicia social y la democracia”, puntualizó el Movilh.