In Memoriam. Radio Rock & Pop (1992-2011)

Originalmente publicado en Nota Facebook de César "Chicoria" Altamirano
Siguiendo las enseñanzas de mis maestros beats, escribo esto en caliente, dejo que a mi corriente de consciencia lleguen los recuerdos a borbotones, sin revisar, como un disparo, un arrebato, un vómito necesario, desde lo más profundo de mi corazón y mis vísceras.

Sigo mi viaje en bicicleta, la mayor parte del tiempo no veo televisión ni escucho radio, ni leo los diarios, pero gracias a la tecnología y mi pequeña netbook uruguaya,siempre estoy conectado con Chile y al día con las noticias que acontecen tanto en mi entorno más cercano como en el resto del país.

Así fue como me enteré hace pocas horas de 2 hechos importantes. Un nuevo terremoto en el sur de Chile, cerca de mi querida caleta de Tirúa y de otro terremoto, el tiro de gracia final a mi Alma Mater: mi añorada radio Rock & Pop.

Como una vez muy bien resumió una situación desagradable mi amigo Gonzalo López: Hasta que terminaron pasándose a caca. Hasta que finalmente lo hicieron. Mataron a nuestra querida radio. ¿Están contentos? Qué le vamos a hacer. Es el signo de los tiempos, como diría Prince. La globalización sin fin es un monstruo que se lo termina devorando todo. La excusa es la de siempre: requerimientos de la empresa y necesidades del mercado, o mejor dicho Mercado, ese ser omnipotente que lo regula TODO. Otro buen amigo, Iván Rivera siempre se pregunta ¿Y dónde queda la dirección del maldito Mercado? Porque le quiero entablar ASÍ un reclamo y una denuncia. Porque esto no puede seguir así. En nombre del Mercado se pisotea el trabajo, la dignidad, la pasión, los sueños y el esfuerzo de toda una vida de una hermosa generación de trabajadores, y en este caso de jóvenes periodistas y locutores que lo único que querían era brindarnos el mejor rock y el mejor pop del planeta. Y de un día para otro los corren como quien espanta a un pobre perro tiñoso. Y una vez más las empresas se olvidan que no son NADA sin el recurso humano. Se olvidan que están tratando con PERSONAS, con rostro, nombre y apellido, y no una estadística, unos simples funcionarios grises con un número de serie en su solapa, como en la película Brazil. ¿Quién va hacer mejor la tarea que estas apasionadas personas? ¿El Dalet, o ese maldito robot programador -que por suerte no me acuerdo el nombre- y que ponía la misma canción de Smashing Pumpkins como 3 veces al día, todos los días y había que reprogramarlo a cada rato? Lo dudo. ¿Y quién va a conducir los programas ahora? ¿El robot de magnetoscopio musical, el Tongas, el compadre Criss? Dudo que lo hagan mejor que una persona con sangre rockera en las venas.

Pero al fuckin\' mercado le importa un carajo esto que estoy diciendo. En Chile ya nadie le está dando importancia a los procesos, a darle a los proyectos el espacio y el tiempo necesario para que germinen y maduren. Ya sucedió hace poco en el fútbol, con la cochina zancadilla que le hicieron al loco Bielsa y al final volvimos al mismo lugar en donde estábamos: el júrgol mediocre y ratón de siempre. Somos el único país que se da el lujo de interrumpir el único proceso futbolero serio que hemos tenido en décadas. La FIFA debiera sancionarnos por ser unos soberanos giles ineptos.

Y con la Rock & Pop en cierto modo pasó lo mismo, pero de a poco. Fue una muerte lenta, agónica que duró muchos años, demasiados. Porque la mataron muchas veces e intentaron inútilmente revivir un muerto. Mejor la hubieran matado de un tirón sacándola del aire de manera radical. Así hubiera dolido menos y sus viudos la hubiéramos
llorado sólo una vez, y no todas las veces que llenos de esperanzas la volvíamos a escuchar para volver muy pronto a morder el polvo en proyectos cortados a la mitad y que cayeron en picada.

LA ÉPOCA DE ORO
Es difícil ser la radio líder en sintonía por tanto tiempo. Fue casi una década de hegemonía, un hito no superado hasta ahora en la historia de la radiotelefonía chilena (me encanta este arcaísmo de Renato Deformes). Es una situación insostenible si aplicamos un mínimo de lógica humana. Ni Los Beatles estuvieron tanto en el tope ni duraron
para siempre. La radio vivió su edad de oro en los años \'90, en la también dorada época del grunge, el brit-pop, la época del auge de la industria musical y de la venta de CD\'s. Una era que no volverá nunca más, algo que por un lado me da mucha pena, porque siento mucha nostalgia por mis años de universitario, por lejos una de las mejores etapas de mi vida hasta ahora. Cierro los ojos y me veo escuchando la radio desde la mañana hasta la madrugada.Yendo de mi casa a la U, viajando en micro, escuchando siempre la Rocka. Una radio que apareció en mi vida en el momento exacto. Me recuerdo como si fuera ayer de aquel histórico 16 de diciembre del \'93, cuando la Rocka fue la única que entrevistó a Paul McCartney, y yo estaba en la galucha del Nacional, en mi primer viaje solo como provinciano a la capital, con mi personal stéreo sintonizado en la 94.1 cuando de repente Iván Valenzuela tiró la bomba: que Pablo Aranzáes estaba a minutos de conversar con esta leyenda viviente. Me recuerdo del otoño del \'95, encerrado en mi habitación escuchando a las 10 de la noche un programa especial, con el dedo preparado en el REC de mi cassetera y esperando con ansias el momento en que el inefable Pablo Aranzáes (nuevamente) anunciara la exclusiva de la R&P, un regalo para todo el mundo, la primera canción nueva de Los Beatles en 25 años: Free As A Bird y al otro día llegar a primera hora a la cafeta de mi escuela de Periodismo a compartir esa joya y llorar a moco tendido con todos mis amigos
musicales, que como yo son fanáticos de los Fab 4, naturalmente. Me recuerdo de escuchar y grabar los especiales de fin de semana (cintas que aún conservo y guardo como una preciada joya de arquelogía musical para el futuro), los Porque Es Especial Solo..., Los Bacalaos Daos, La Alcantarilla Gaseosa, Melodías Subterráneas, Ciudad y Playa Cuática, Garganta Rotunda, la clásica Caverna del Pato Cuevas, El Show de Los Discos, la Legión de los Lagos, La Revolución Flaite, El Teléfono de los Atorados y las inolvidables Raras Tocatas Nuevas... y Pencas.

Con la Rock & Pop siempre relaciono el recuerdo de escuchar las recomendaciones de nuevos lanzamientos y nuevas bandas y de ir todos los finales de mes a mi tienda de discos favorita a comprar el último CD... o dado mi exiguo presupuesto de lolito universitario, el más modesto, pero clásico cassette. Como cuando compré el OK Computer y todos mis amigos melómanos de la escuela de Periodismo nos agarrábamos la cabeza, no lo podíamos creer, de ser
protagonistas en vivo y en directo, en tiempo real, de estar asistiendo a un acontecimiento histórico, como en su oportunidad lo fue el Sgt. Pepper, guardando las proporciones claro está. De ver el nacimiento dell disco que marcó a mi generación. O por lo menos a mí. (El tiempo me dio la razón y ahora el OK es un disco clásico). Me acuerdo que estuvimos pelando el cable con esa obra maestra desde junio a diciembre del \'97. Y así, infinidad de recuerdos e inolvidables voces y programas que llenaron mis ondas radiales durante horas, meses y años.

Pero el fin de esta era "análoga" también tiene su lado bueno, porque en definitiva es gracias a la democratización de los medios de producción y difusión que ahora podemos acceder en formato "digital" a las canciones que amamos sin necesidad de los molestos intermediarios, los parásitos de la industria musical (léase sellos, Feria del Disco, mánagers, promotores y hasta secretarias) que se llevan todo el dinero a costa del talento ajeno. Esos me tienen sin cuidado. Y los músicos pueden estar tranquilos, porque en estos años ya aprendieron la lección que su negocio ahora está en tocar, tocar y tocar (como Los Jaivas en La Vida Mágica, ay sí). Tocar en vivo hasta la muerte y no en seguir grabando discos en las mismas condiciones en que ocurrió en los últimos 80 años. Ese paradigma ya no sirve para estos tiempos. Y la
forma de difundir esa música en este nuevo estado de cosas tampoco.

Y yo creo que ahí está el talón de Aquiles de la Rock & Pop. La radio dejó de ser la líder a comienzos de la década sin nombre que acaba de terminar (la de los 2000, se entiende), época que coincide con la salida de su director histórico, el Gran Tom, lo que no deja de ser decidor. Y desde mi punto de vista de auditor, (debo confesar que siempre me sentí más cómodo en este rol que como periodista, pues todas mis opiniones expresadas en las infinitas reuniones que teníamos como equipo eran las del furibundo y leal auditor) me parece que desde ese momento en adelante la Rock & Pop nunca acusó recibo de que el pirateo de discos y los reproductores portátiles y digitales se les venían encima con todo y serían su mayor enemigo y competencia.
LOS PROBLEMAS

Desde que estaba en la U que vienen anunciando la famosa radio digital y nunca se ha implementado del todo. Hasta ahora sólo se ha materializado en los podcasts, un fenómeno que yo diría es más marginal que masivo, donde tienen cabida segmentaciones de público muy específicas y orientadas a círculos de iniciados en esto de la
melomanía y donde cada uno termina escuchando lo que le gusta y punto. Pero también creo que esto se puede transformar en un fenómeno a nivel masivo, en el nivel de la industria radial y no sólo una plataforma restringida a cualquier freak amante del rock que esté en su casa y quiera compartir en la cyberósfera su colección de discos. Este es el verdadero futuro, el lugar donde la radio sobrevivirá si no quiere ser condenada definitivamente al olvido, lo que ya está pasando con los sellos y las tiendas de discos, que cada vez más venden cualquier chuchería, menos lo esencial: música.

Otro error de la Rocka es que tampoco quiso seguir envejeciendo con su público que la escuchó desde el principio y quiso jugar a la ilusión que te vende la Rolling Stone, eso de ser un eterno adolescente. Y es lo que pretende el actual proyecto, convertirla en una estación orientada a los púberes. Pero mucho antes empezaron a aparecer
las cancioncitas de moda, de temporada de verano, grupos y solistas insulsos, insoportables, totalmente olvidables, en una radio absolutamente a la deriva, perdida y sin destino programando cosas horribles como el Gato Volador (Nunca voy a olvidar la náusea que me provocó escuchar por primera vez eso en MI radio) o Maná, o esos adolescentes disfrazados de tristes autodenominados Emos, (pienso qué mierda pueden saber esos pendejos de 15 años sobre lo que es sufrir y estar verdaderamente triste en este mundo. No lloren tanto mamones, sumen años mejor, intenten conseguir trabajo y mantenerlo en el Chile de Piñera en los años que vienen y después hablamos de lo que es pena y alienación).
Y depués fue el maldito reggaetón. O sea, dando palos de ciego pesado, al mismo tiempo que la radio se convertía en una verdadera puerta giratoria de periodistas, locutores y directores. Procesos interrumpidos a los meses de haberse iniciado, todo en conformidad a las directrices del susodicho Mercado.
SOPORTANDO A "LOS DE ARRIBA"
Y en medio de todo eso, nosostros y nuestros compañeros y colegas de trabajo, soportando estoicamente una y otra vez los continuos cambios, giros, reformas, relanzamientos y cuanta cosa se les ocurrió a "Los De Arriba", a las brillantes cabezas pensantes comandadas por Mr. Z y Cía. Señores, con todo respeto les digo: sabrán mucho de cifras, números y billetes pero no saben un carajo de Rock & Roll, ustedes no aman la música como nosotros, y nunca podrán entendernos ni se acercarán así tanto a todo el espectro de sensaciones que provoca en nuestro organismo. A ustedes le da los mismo cualquier mierda que esté sonando mientras la fábrica de salchichas en que se convirtió el maravilloso
arte de componer canciones siga machacando nuestros oídos con pura bazofia. No sospechan ni de cerca la alegría y la libertad que significa la música para nuestras pedestres pero dignas existencias de chileno de a pie. Ustedes nunca entendieron ni entenderán la PASIÓN y el AMOR que siente un Alfredo Lewin, un Guatón Lira, el Nacho, la Mati
y mi amigo Raúl Gutiérrez, fanático de Los Beatles, para variar, y a quien dedico especialmente estas líneas. El Harry es el tipo con la camiseta más puesta por su trabajo que he conocido en mi vida. La tenía puesta hasta la exageración, a veces a costa de su salud. Tanto que a veces le apretaba el pecho y sufría de permanente stress, siempre obcecado, perfeccionista, detallista y minucioso, siempre enfocado en realizar un trabajo impecable, de que la salida al aire fuera perfecta, en fin, de hacer bien la pega y ser feliz y realizarse con lo que uno le está ofreciendo a esta sociedad como obrero de la radio y del rock. Así que a tipos como Raúl nadie puede venir a darle lecciones de lo que significa la responsabilidad, la dedicación, la voluntad, el trabajo duro, bien hecho, realizado con amor, con alegría y con toda la pasión del mundo.

De eso también se trata el rock & roll. Y de eso también se trató durante todos estos años la Rock & Pop ¿o no?
La Rock & Pop está definitivamente extinta con la salida de los últimos históricos (e histéricos). Amigos, la radio con la que crecimos desapareció. Ella ya no existe más (Los Jaivas de nuevo). Fue mi compañía en mi solitaria y conflictiva adolescencia, mi inspiración para estudiar Periodismo y especializarme en música popular y rock, fue sin dudas mi Alma Mater, el medio en el que siempre soñé trabajar (ya que El Diario La Época murió antes de mi egreso). Fue el lugar donde me recibieron siendo un torpe y temeroso estudiante en práctica, y me aceptaron y me quisieron por primera vez en mi vida, así, tal como soy, donde me convertí en el Chicoria, un personaje del que todavía varios se acuerdan con cariño, donde aprendí de verdad lo que es el periodismo, el trabajo en equipo y a ser un verdadero profesional. Fue una escuela para la vida, un crisol inagotable de lindas experiencias, de pasarlo bien todo el día, de estar siempre cagado de la risa, feliz de trabajar en lo que a uno le gusta, de celebrar las tonteras y ocurrencias de los cabros del Portal del Web y su humor bizarro, de escuchar canciones malas en el Dalet a la hora de almuerzo, un lugar donde conocí a
amigos para toda la vida como Tom, Harry, Alfredo, Pablo, la radio que me permitió reencontrarme en un momento clave de mi existencia con un gran amor de mi infancia, juventud y de toda mi vida.

Fue el lugar al que siempre quise regresar y al que finalmente volví muchos años después, ya titulado pero siendo el mismo pobre diablo torpe y temeroso, pero con una pasión por la música y el rock más grande que nunca, un sentimiento que no me cabía en el pecho. En fin, es un privilegio y un honor para toda la vida poder decir que trabajé en la Rolls Royce, en el Barcelona de las radios chilenas. Les puedo asegurar que ninguna otra tiene la magia y la mística de la Rocka. Es así de simple, es algo que no se puede explicar con palabras. Tendrías que haber estado ahí para entender de qué estoy hablando.

Ufff, podría seguir por horas y horas. Mejor espero reencontrarme muy pronto con mi gran amigo Harry para hablar de lo humano y lo divino, de esto y de aquello y del rock y el pop saboreando una cálida copa de vino y hacer el último brindis por otro memorable pedazo de la historia de Chile que se nos va.

Porque como muy bien reflexiona el Count, al final de ese desopilante y magnífico homenaje a la radio que es la película "The Boat That Rocked":

Para todos nuestros auditores, Esto es lo que tengo que decirles: "Dios los bendiga a todos". Y a ustedes, los bastardos a cargo, les digo que el sueño no se ha terminado. Los años van y vienen y los políticos siempre joderán todo lo que hace de este mundo un lugar mejor. Pero alrededor de todo el mundo, los hombres y las mujeres jóvenes siempre soñarán sueños y pondrán esos sueños en canciones. Nada importante muere esta noche, tan sólo una manga de tipos feos en un barco de mierda. Lo único triste de esta noche es que, en los años venideros, habrá tantas canciones fantásticas y no tendremos el privilegio de tocarlas. Pero créanme, ellas seguirán escribiéndose, seguirán siendo cantadas y serán la maravilla de este mundo.

Que así sea. La Rock & Pop ha muerto, viva por siempre la Rock & Pop!!!

(Dedicado a todos quienes alguna vez tripularon y vivieron los mejores años de su juventud en este bello y viejo barco hundido).
FOTO: Por bigchus en Flickr (cc)