¿Cuál es el gentilicio de la Región de Los Ríos? Esta consulta no es menor, puesto que el gentilicio atraviesa todas las estructuras territoriales, es decir, se transforma en un nombre, un patrimonio un sello, un diferenciador, un identificador, una denominación y hasta una marca que tiene la encomiable misión de cohesionar a las personas que pueblan un territorio.
En este comentario revisaré tres momentos que contribuyen a definir el gentilicio de la Región de los Ríos. El primer momento está fechado el 22 de septiembre de 1544 cuando Pedro de Valdivia y Juan Bautista Pastene descubrieron el otrora territorio de Ainilebo. Casi una década más tarde -el 18 de marzo de 1554- Carlos I de España concedió el escudo de armas a la ciudad de Santa María La Blanca de Valdivia mediante cédula real.
En la descripción del escudo de armas está un río caudaloso que sostiene a una ciudad que en su torre flamea una bandera con fondo blanco que la cruzan diagonalmente dos gruesas líneas rojas. El origen de esta bandera se ubica en el siglo XVI en los Países Bajos y en la actualidad establece un parangón por dos motivos. El primero porque distingue a la ciudad de Valdivia y segundo porque es un elemento que cohesionó a todas las personas que aclamamos la Nueva Región.
El segundo momento es el 5 de abril de 2007, fecha de publicación de la Ley 20174 que crea la Región de los Ríos. Para fines prácticos este evento significó un salto cualitativo en nuestro gentilicio. En efecto, sobrepasamos el gentilicio de valdivianas o valdivianos que nos identificaba en el país y en el mundo por la división administrativa provincial y comunal, para adoptar el hasta ahora incógnito gentilicio de personas de la Región de Los Ríos.
Por cierto, el gentilicio de valdiviana y valdiviano permanece inalterado por la comuna de Valdivia y la Provincia de Valdivia. La diferencia es que el gentilicio está acotado a una porción del nuevo territorio y aparecen el de ranquina y ranquino para las personas de la Provincia de Ranco.
En función de este resultado viene la discusión de un tercer momento. El gentilicio de la Región de Los Ríos no aparece por ninguna parte ni siquiera dentro de los talleres de trabajo que hubo en torno a la redacción de la Estrategia de Desarrollo Regional. Una crítica constructiva a esos talleres y a la actual administración regional es que dentro de su metodología deberían haber considerado el gentilicio. Por este motivo, nos permitimos sugerir el gentilicio de ribereña o ribereño que consideramos que es específico, preciso y sonoro.
Quiero concluir este comentario enfatizando que el gentilicio es mucho más que un sobrenombre, puesto que tiene su fundamento en los hitos territoriales que generan una rica identidad que comprometen el presente y el futuro de la Región de Los Ríos.
Foto Flckr/CC pulguita